Fotos: Rodrigo Puente
Texto: Alixx Core
Como todos los Viernes hay un evento chingón en la ahora CDMX, no podíamos pasar por desapercibido el hecho que más de 5,000 personas se reunieran en el Pepsi Center para ver a la banda británica de deathcore Bring Me The Horizon.
Desde hace varios meses, se anunciaron las fechas en México tanto para el Pepsi Center, Monterrey y Guadalajara respectivamente. En estos instantes, la banda está promocionando su quinto álbum de estudio That’s The Spirit, que desde el 26 de Febrero está a la venta.
Debemos de reconocer que este álbum causó tendencia en las redes sociales con el tema “True Friends” desde Australia hasta el Reino Unido con el hashtag de la misma canción. Es un álbum de 11 canciones con riffs impresionantes y pistas que en verdad hacen una ovación en cualquier lado. Fue grabado en Grecia en los estudios Black Rock y lo mejor es que está producido por Oli y Jordan, integrantes de la misma banda.
La banda, lidereada por Oli Sykes en la voz, Matthew Nicholls en la batería, Matt Kean en el bajo, Lee Malia en la guitarra y Jordan Fish en los teclados; nos mostraron toda la actitud desde la primera canción que interpretaron; “Doomed”.
Con una actitud muy chingona, Oli se movía de un lado al otro del escenario para interactuar con el público. Un público adolescente, haciendo moshpit de aquí para allá y varios padres al lado de las aceras o en la parte de atrás para estar al pendiente de estos niños que traían todo el power en cada rola.
Después escuchamos “Happy Song” y algunas más como “Throne”, tracks del That’s The Spirit, que han sido de las favoritas de este álbum. Pero en la que más se alocó el público fue con “True Friends”. La favorita de varios “Can You Feel My Heart” y para terminar, antes del encore, sonó “Antivist”.
Ya para terminar este tremendo concierto, que dejó sudor por todos lados y varios buenos golpes a los espectadores por toda la energía en el moshpit, su cierre fue con las canciones de “Blessed With A Curse” y “Drown”.
Siempre con una actitud súper pro, hacen que cada concierto de este quinteto se vuelva pura fiesta en cada fecha que nos regalan. Selfies en Instagram y agradecimientos cada que Oli podía, culminó en una noche sorprendente y con un buen sabor de boca a todos los espectadores.